A 2.500 km de Moscú, en el archipiélago de Spitsbergen, se encuentra el asentamiento Pyramiden en el Ártico, un lugar que ha decidido mantener vivo el legado soviético.

Svalbard, también conocido como Spitsbergen, es un caso único en la política internacional. Aunque oficialmente el territorio pertenece a Noruega, aquí pueden convivir en perfecta armonía ciudadanos de 70 países, gracias al Tratado de Svalbard, firmado en París en 1920.
Sin embargo, actualmente solo encontramos asentamientos noruegos, rusos y estaciones científicas chinas y polacas. Durante el siglo XX fue un centro importante para la explotación del carbón, pero en los últimos 20 años esta industria entró en crisis, entonces, el turismo comenzó a desarrollarse activamente.
Ahora mismo solo queda un asentamiento ruso activo llamado Barentsburg. No obstante, hay otros dos asentamientos abandonados que antes eran pueblos mineros: Pyramiden y Grumant. Hablemos particularmente de Pyramiden.

El Asentamiento Pyramiden y el legado soviético
Pyramiden era el mayor pueblo ruso en Spitsbergen y nos muestra la imagen de un típico pueblo soviético. Su calle principal está protagonizada por un monumento a Lenin que se mantiene intacto.
Se está intentando que Pyramiden se convierta en un lugar turístico, por eso, el único lugar que permanece activo es un hotel. Se llama Hotel Tulpán y es mantenido por siete personas durante el verano.
El legado del pueblo en general permanece intacto. Las casas, los muebles, incluso los libros en las bibliotecas. Tiene todas las características de un pueblo fantasma, solo que aquí, toda la vida y la cultura soviética se quedaron paralizadas. Sencillamente es como hacer un viaje al pasado, lo que es un poco escalofriante.



Se espera que con los años, la noticia de que este asentamiento existe le dé la vuelta al mundo y pronto empiecen a llegar más turistas.
Imágenes de Pyramiden, asentamiento fantasma